lunes, 14 de febrero de 2011

Vergüenza ajena (o propia)

Si los medios de comunicación (y sus periodistas) son la correa de transmisión de la información de un país, el nuestro, Aragón, esta condenado al ostracismo, la incultura y el paletismo superlativo. Solo hay que ver lo acontecido este fin de semana en el estadio alcoraz cuando unos periodistas aragoneses impidieron al entrenador del Girona (aragonés también, de Mequinensa) hablar en catalán para un medio de comunicación catalán.
penica de país.

Dictadores



Una pequeña llama ardió en Túnez y de la noche a la mañana la sociedad occidental se ha dado cuenta que aquellos presidentes que antaño recibíamos con todos los honores eran unos dictadores. Por dios pero no habíamos quedado que los dictadores eran solo los Castro, el régimen de los ayatolas de Iran, los juches de corea y la Venezuela bolivariana, ¿como es que nadie conocía el estado político de Marruecos, Túnez o Egipto a pesar de estar a unos pocos kilómetros de las costas europeas? o será que los dictadores solo son tales cuando no colaboran económica y politicamente con occidente. Y no hablemos ya de los petrodictadores de la peninsula arabica.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Sobre cho¿v?enallas

No puedo estar más de acuerdo con el articulo de Tierra de Barrenaus dedicado a los prejuicios en contra de la juventud. Esta especie de miopía generacional es una de las cosas que no aguanto. La gente que se cree que los de su generación era unos santurrones y que las posteriores son una pandilla de drogatas, incultos y aborregados. El problema es que antes lo veía como parte implicada (joven) y conforme pasan los años me sorprende como gente de mi edad que tan apenas bordean los treinta comienza a repetir esas frases, al igual que lo hicieron sus padres, sus abuelos y así como nos recuerda barrenau hasta llegar a los tiempos de Socrates.
No, la juventud es como ha sido siempre, el problema es que lo que antes veiamos como atrevido y valiente ahora lo vemos como inconsciente e insolente.

Que alguien me haga el favor y me corte la lengua si alguna vez me escucha decir el "esta juventud de hoy..."
Por cierto a mi también se me revuelve el alma como a Florencio cuando veo el Chovenalla